lunes, 28 de enero de 2008

De vuelta

Se me habia olvidado este, el de hoy no difiere mucho, este lleva almacenado desde finales de enero, pero aquí está, pues era para compartir con vosotras.

La revuelta



Revuelta pues si, por qué? No sé. Este era el año, es el año, noooo, al menos eso dijeron las maripilis en una fría noche allendes mares. Ahora aquí al otro, un lado más cálido, y aunque a veces más frío ( ya sabéis como se las gastan con los fríos en estas latitudes).



Sí frío, a veces siento frío, el corazón se para, miro el mundo incrédula, desde fuera, desde lejos, y donde quedo, donde estoy, donde voy, con promesas, si, también con promesas Mara Zul para este largo 2008, uf un día más.

miércoles, 16 de enero de 2008

Propósitos y peticiones 2008

Me encuentro en ese innumerable grupo de personas que cada comienzo de año se hacen propósitos de enmienda. A veces son los típicos, los que nadie cumple: dejar de fumar, hacer deporte, estudiar algo, esas cosas. Pero ahora me he dado cuenta del poder de los propósitos que pueden parecer insignificantes, que viene a ser algo así como el dios de las pequeñas cosas. Así, el año pasado me propuse tener más vacío el congelador y tirar menos comida. Lo del congelador es porque cuando voy a la compra me posee un espíritu de madre numerosa, de las que viven con los suegros incluso. Esto quiere decir viviendo sola, desayunando y comiendo fuera la mayor parte de los días de la semana tenía los 3 cajones del combi a reventar. A este espíritu le acompañan momentos de optimismo injustificado y de concepciones del tiempo absolutamente elásticas, cuya consecuencia era al final no he hecho el pollo asado que pensé iba a hacer hace una semana y para lo que saqué el pollo del congelador. Resumiendo, que he conseguido tirar menos cosas, tener un ambiente más saludable en mi casa con tanto alimento mutando y poder tener ¡hasta hielo! en ese combi.


Pues este año bisiesto tengo otro, mucho más abstracto: demostrarles más cariño a mis amigos. Y esto, que parece fácil, no sé si lo va a ser tanto, pero yo lo voy a intentar. Y tengo otro, este sí difícil difícil, que es el de que el orgullo no me impida pedir ayuda, de la que sea. Voy a ver como lo gestiono.


Pero además, aún a riesgo de pecar de avariciosa, quiero pedirles a mis maripilis que escriban, aquí o donde sea, si es aquí mejor.


¿es mucho pedir?